Bruselas quiere fijar reglas claras para las ayudas de estado al sector energético. El vicepresidente y comisario de Competencia, Joaquín Almunia, ha elevado una petición al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, para que los comisarios se reúnan este martes en un debate de orientación al respecto, para después abrir un proceso de consultas públicas y tener listas las líneas maestras en el primer trimestre de 2014. Fuentes europeas explicaron ayer que el objetivo es dotar de más claridad y transparencia a las reglas del juego —para evitar la presión que ejercen los lobbies, los grupos de interés— en ámbitos como la energía nuclear, las renovables y la financiación de infraestructuras, así como el tratamiento que algunos Estados dan a las industrias intensivas en energía.
Se trata de un debate espinoso, en especial en lo relativo a la energía nuclear. Los ecologistas y los grupos de presión contrarios al uso de esa fuente de energía pusieron el grito en el cielo a principios de verano, cuando trascendió que Bruselas podía decantarse por el camino que arranca hoy. Greenpeace volvió ayer a la carga y aseguró que la Comisión “no debería acordar esas directrices porque en la práctica eso supondrá subsidiar al sector nuclear y creará distorsiones de mercado injustificables y riesgos ambientales”. Los planes de Competencia han creado controversia en varios países, como Austria y Alemania.